Hola, amigos de mi blog.
Estoy feliz porque estemos festejando ocho años desde que arrancamos con este blog boticario.
Falta muy poco para llegar a las 70.000 visitas.
Sumamos un total de 227 posteos al día de hoy.
Este blog les muestra (y me recuerda) los acontecimientos más importantes de mi recorrido literario.
Un recorrido simple, cálido y repleto de lindos momentos. Muchos de ustedes fueron partícipes de este camino: los nombro, subo sus fotos. Muchas ciudades de mi país Argentina, y de otras del mundo están en mi espacio virtual.
Desde mi primer cuento publicado acá, todavía no impreso en ese momento, hasta los siete títulos que me acompañan hoy impresos en papel formato libro: todos fueron presentados, todos forman parte de este blog: mis ediciones independientes y autogestivas.
De a poco se fueron sumando todas las historias, todos los personajes.
Des palabras armando (cuentos cortos) 2011
Kumiko, mujer sin tiempo (novela) 2011
Amaneceres (novela) 2012
Baúl de cuentos de la abuela (cuentos cortos) 2013
Las aventuras de Cata y su abuela Lili (cuentos infantiles) 2015
Las madrugadas de Agustín (novela para preadolescentes) 2017
La sopa mágica de piedra (cuento infantil) 2018
Mis Paradas boticarias intentaron poner mi impronta con el sombrero gardeliano que me acompaña en cada una de mis salidas y muestras. De este modo, recorrí muchas localidades, en donde me abrieron las puertas para mostrar lo que más quiero en el mundo literario: mis libros. Libros que llegan al corazón de grandes y chicos.
No puedo dejar de mencionar a la editorial Enlace de Bogotá, Colombia: confió en mis historias. Hasta la fecha publicó cinco títulos de mi autoría. Esto me permitió acercarme, por medio de mis personajes, a inmumerables colegios de toda Colombia, y próximamente de otros países. Visitar Bogotá y Medellín en 2015 y 2017, conversar con los docentes y alumnos que habían trabajado con mis cuentos y novelas, fue sencillamente maravilloso.
A cada uno de ustedes por visitar mi blog y dejar un comentario: millones de gracias. Sin sus visitas, este espacio virtual no tendría razón de existir.
La mención, que llena mi alma y la completa, se refiere a la Escuela pública y rural N19, Almafuerte de la localidad bonaerense de Gorostiaga. El día en que visité la escuela en noviembre de 2015, y la Directora del establecmiento me dijo que me habían elegido como Madrina de la escuela... wuauuu, explotó mi corazón de alegría, emoción, recuerdos de infancia... todo y mucho, sentimientos que no puedo explicar con unas pocas palabras. No se escribe... se siente en las entrañas. Esta escuela, en donde tuve mi formación primaria, es y será mi orgullo siempre.
Elijo algunas fotos al azar para colorear este posteo.
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Muchas gracias,
Graciela Amalfi.
Noviembre 2015.
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